Que Google+ no comenzó con buen pie es algo sabido por todos. Sin embargo, la red social de Google ha demostrado en los últimos meses ser una alternativa eficaz para la estrategia de social media de las empresas, e incluso podría superar el número de interacciones en Facebook en unos pocos años.
Aunque aún existan varios escépticos con respecto a esta red social, la realidad es que ya son muchas las empresas que han decidido tener presencia en Google+. Ya sea por que ofrece grandes oportunidades para nuestro negocio (conocer gente nueva, conectar con clientes potenciales, profundizar las relaciones con los consumidores…), o simplemente porque estar presente en ella significará tener a Google de nuestra parte(venga, ¿quién no quiere eso?), emplear algo de esfuerzo en desarrollar nuestra identidad de marca en Google+ debería ser uno de los primeros puntos en nuestra lista de tareas pendientes.
Tanto si pretendes crear un perfil de tu negocio en Google+ como si ya lo tienes desde hace tiempo, debes prestar atención a algunos de los errores cometidos con frecuencia por las empresas en esta red social. No saber aprovechar las ventajas que ofrece Google+ podría ser una de las razones por la que las empresas no terminan de engancharse. Social Media Today ha publicado un artículo con algunos de los errores más frecuentes.
1.- No completar tu perfil
Una de las principales ventajas de tener una página de empresa en Google+ es que esta repercutirá de manera directa en tu SEO. Google tendrá muy en cuenta el nombre de tu empresa y las palabras clave asociadas a ella en tu perfil a la hora de mostrar los resultados de búsqueda. Por ello es importante clasificar correctamente nuestro negocio, incluir palabras clave en su descripción, especificar su ubicación (fundamental para Google Places, sobretodo si no tenemos tienda online) y los datos de contacto y enlazar nuestro sitio web y todos nuestros perfiles en otras redes sociales.
2.- No basta sólo con un puñado de palabras clave
Si bien las palabras clave son un punto fundamental en el perfil de nuestra empresa en Google+, no basta sólo con eso. Si queremos conseguir una alta clasificación SEO, recurrir al viejo truco de las palabras clave no será suficiente. ¿Has oído hablar de la búsqueda semántica de Google? Se trata de un complejo proceso que clasifica las páginas en función de su calidad y su contenido. En resumen, no esperes que por repetir cinco veces “ropa barata” en tu perfil de Google+ conseguirás posicionar mejor tu tienda de ropa. Google podría detectar esto como spam y penalizarte por ello. Si relamente queremos un perfil atractivo y valorado por Google, debemos hacer una descripción natural añadiendo algún nombre o característica de nuestros productos.
3.- Utilizar una imagen de portada poco adecuada
Hace unos meses, Google+ modificó el diseño de sus perfiles y añadió una imagen de portada más grande. Si nos damos una vuelta por algunos perfiles de Google+ no nos costará encontrar más de uno con unaimagen de portada pixelada o desproporcionada. Es importante cuidar el tamaño y las dimensiones de esta imagen. Utilizar una imagen de 489x270 píxeles no es una buena idea. Siempre será mejor utilizar una de grandes dimensiones, algo cercano a los 2000x1000 píxeles, además de escalarla de forma adecuada para evitar que ésta se deforme.
4.- No usar los círculos
Una de las características que diferencian a Google+ es que nos permite segmentar las personas que seguimos mediante los círculos. Para las empresas, esto significa que podremos enviar mensajes diferentes en función de los círculos a los que queramos dirigirnos. Es buena idea utilizar los círculos para diferenciar a nuestros clientes físicos, clientes en línea, personal de la empresa y otras empresas con las que colaboramos. Incluso podríamos tener un círculo sólo para nuestros proveedores.
5.- Publicar sólo sobre ti mismo
Este error también es aplicable al resto de redes sociales. La función de las redes sociales es la interacción, y definitivamente no estamos dando pié a ella si únicamente hablamos sobre nuestros nuevos productos y servicios o sobre las actualizaciones de nuestro blog. Lo ideal en este caso es seguir la regla del 80/20, es decir, un 80% de mensajes deben hablar sobre temas de interés ajenos a tu propia empresa (mercado, clientes, competidores…) y un 20% de ellos deben hablar sobre la propia empresa y sus productos.
6.- Ignorar comentarios negativos
Lógicamente, tendrás que enfrentarte a comentarios negativos. Las redes sociales son un foro de opinión abierto, e ignorar este tipo de comentarios es un completo error. Es importante estar atento a ellos y tratar deresponder a las quejas y preocupaciones de los clientes con una actitud positiva y elegante, ya sea a través de otro comentario en la red social o de un correo personal. Borrar u omitir este tipo de comentarios no sólo perjudicaría nuestra imagen, sino que sería el inicio de un problema mayor.
7.- No unirse a comunidades
Las comunidades son una de las funciones que hacen de Google+ algo grande. Para hacernos una idea, se trata de una especie de respuesta a los grupos de Facebook, los hashtag de Twitter o los propios grupos de LinkedIn. Trata de encontrar comunidades que se adapten a tu nicho de negocio y únete a ellas. Google+ te dará recomendaciones sobre algunas comunidades que podrían interesarte según la temática de tus actualizaciones, pero si ninguna acaba de atraerte siempre puedes crear la tuya propia e invitar a tus seguidores a unirse.
8.- Publicaciones sin comentarios
Publicar un enlace sin añadir ningún tipo de comentario no aportará nada de valor a tu página ni a tus seguidores. Además, estos mensajes tienen una baja participación. Incluye siempre una breve introducción que incite a tus seguidores a acceder al enlace o compartirlo.
9.- No tener un botón de +1
¿Aún no eres consciente del poder del +1? Asegúrate de que tu página web, tu blog y las páginas de tus productos cuenten con este botón visible.
Y tú, ¿ya utilizas Google+ en la campaña de social media de tu empresa? ¿Qué consejo le darías a alguien que esté empezando a utilizar esta red social?
Por: Alba Barrera
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